Rodeado de selva, playas vírgenes y habitada por pescadores locales, Koh Kood es una isla virgen, en la que se encuentra Soneva Kiri, que ofrece una combinación inigualable de lujo, diseño respetuoso con el medio ambiente e inolvidables experiencias tailandesas. Cuenta con 36 villas con piscina, todas ellas con vistas al Golfo de Tailandia.